Laura Pollán, esposa del opositor encarcelado Héctor Maseda, aseguró este martes que "mientras quede un preso político habrá Damas de Blanco" y dijo que rechazará cualquier oferta de asilo, incluso si su marido es liberado y decide abandonar el país.

"Me alegraría mucho si sueltan a mi esposo, pero si él decide irse del país, yo me quedaría", dijo Pollán en entrevista con DIARIO DE CUBA.

"Las Damas de Blanco tenemos mi casa como sede. Aquí hemos dormido en el piso hasta 33 mujeres. Hay un compromiso, una dignidad en esta lucha. Nunca voy a abandonarlas", señaló la activista.

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por la libertad de los presos políticos cubanos
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5 Comentarios:

  1. Anónimo dijo...

    Esta odisea que sufre el pueblo de Cuba tiene que terminar. No es justo tan crimenes contra este noble pueblo de parte de esbirros nativos.
    Henry Agüeros Garces.

  2. Anónimo dijo...

    Cuánto odio y racismo he encontrado en éste blog!!!!!, huele a la época del nacional socialismo en Europa, todos sabemos la "gran obra" de éstos,es una pena que para nuestra América se añore volver a la época de "todo para unos pocos y nada para los muchos"

  3. Anónimo dijo...

    Soy parte del pueblo nativo de Chile y no somos esbirros,la historia nos ha demostrado que los esbirros fueron los que llegaron desde afuera, para qué decir desde dónde es cosa sabida por el mundo entero.

  4. Anónimo dijo...

    Durante todos los aNos a habido tanta migracion. Alrededor de 3m o mas se fueron de Cuba, muchos espulsados de esta manera de su propio paiz por esta dictadura. Es inconsebible que esto persiga en el siglo 21. Ya creo que es hora de romper esta cadena de repeticion y no seder a este capricho/miedo de la tirania y destiero de su gente. En la vida, no hay algo peor que el destiero y no tener la posibilidad de regresar nunca a su tierra y ver su barrio!

  5. Anónimo dijo...

    Laura Pollán no defrauda a quienes han confiado y depositado esperanza en ella.
    Por eso la Seguridad no la pudo neutralizar, porque es consecuente y honesta. Estas son las armas contra las cuales el régimen no puede.

    Alejandro