En declaraciones a BBC Mundo, el opositor cubano Guillermo Fariñas describió el anuncio de la excarcelación de 52 presos políticos cubanos como "una puerta que se ha abierto y que ya nadie puede cerrar".

Fariñas, quien pospuso su huelga por un plazo de cuatro meses, en espera de que el gobierno cubano cumpla con la prometida liberación, agregó que "esto es una puerta que el gobierno cubano ha abierto, que no quería abrir, pero que la presión internacional, las circunstancias sociales, económicas, políticas dentro del país, el momento histórico que se está viviendo, la han llevado a tener que dar el paso".

También destacó la necesidad de ir más allá de las excarcelaciones: "Lo importante aquí no es quedarnos solamente en la liberación de esos 52 sino continuar hacia la puesta en libertad del código penal cubano para que no haya delitos de opinión ni delitos políticos".