No queremos pasar por alto que hoy se cumplen seis meses de la muerte de Orlando Zapata Tamayo, tras una larga huelga de hambre para exigir sus derechos en las cárceles cubanas, hecho que dio origen a esta campaña y que volcó los ojos de la opinión internacional a la situación de los derechos humanos en Cuba.

Hoy el hashtag o etiqueta para Twitter es #ZapataVive

por la libertad de los presos políticos cubanos
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10 Comentarios:

  1. Anónimo dijo...

    Ayer en Banes,video de Yoani Sanchez.


    http://www.youtube.com/user/YoaniSanchez

  2. Anónimo dijo...

    A mi muro del facebook va, saludos.

  3. Anónimo dijo...

    Para ar.

    http://www.aguadadepasajeros.bravepages.com/cs/menu.htm

  4. Evidencias dijo...

    Ar, dejanos otro comentario ;-)

  5. Anónimo dijo...

    Marta Beatriz lee la carta

    http://www.youtube.com/watch?v=jTClYVDfRrE&feature=player_embedded#!

  6. Anónimo dijo...

    Respuesta a la carta.

    °°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°


    ARZOBISPADO DE LA HABANA
    NOTA DE PRENSA
    En respuesta al reclamo de comentarios de varios medios de comunicación, y debido a la indignación generada en un número de fieles católicos que han conocido en las últimas horas de una carta abierta dirigida al Santo Padre Benedicto XVI, de contenido ofensivo para con la Iglesia en Cuba, quiero decir lo siguiente:
    Cuando la Iglesia aceptó la misión de mediar entre los familiares de los presos o damas de blanco, y las autoridades cubanas, sabía que esta mediación podría ser interpretada de las más disímiles maneras y provocar diversas reacciones: desde el insulto y la difamación, hasta la aceptación y el agradecimiento. Permanecer inactiva no era una opción válida para la Iglesia por su misión pastoral.
    La acción de la Iglesia a favor del respeto a la dignidad de todos los cubanos y la armonía social en Cuba no comenzó hace veinte años, y ha sido una acción que no se ha apoyado, ni se apoyará nunca, en tendencias políticas, ni en las del gobierno ni en las de quienes se le oponen, sino en su misión pastoral. La Iglesia en Cuba no desviará su atención de aquello que la motivó a actuar en este proceso: el reclamo humanitario de familias que han sufrido por el encarcelamiento de uno o más de sus miembros.
    Esto es algo que conoce muy bien el Papa Benedicto XVI. Vale la pena recordar lo expresado hace unas semanas por el padre Federico Lombardi, portavoz de la Santa Sede: “El papel crucial asumido en el proceso de diálogo cubano por el cardenal Ortega Alamino y por monseñor Dionisio García, presidente del episcopado, ha sido posible por el hecho evidente que la Iglesia católica está profundamente arraigada en el pueblo y es intérprete atendible de su espíritu y de sus expectativas”.
    “No es una realidad extraña, no escapa en los tiempos de dificultad. Carga con los sufrimientos y trae esperanza, con dignidad y con paciencia, sin servilismo pero también sin tratar de aumentar las tensiones ni de exacerbar los ánimos, al contrario, con el compromiso constante de abrir caminos a la comprensión y al diálogo”. La Santa Sede, agregó el padre Lombardi, “apoya a la Iglesia local con su solidaridad espiritual y con su autoridad internacional”. En este sentido, “la Santa Sede se ha declarado siempre en contra del embargo, y por lo tanto solidaria con los sufrimientos del pueblo, y dispuesta a apoyar toda perspectiva de diálogo constructivo… con paciencia, se han hecho importantes progresos en esta dirección. Todos deseamos que el camino continúe”.
    Orlando Márquez Hidalgo
    La Habana, 20 de agosto de 2010

  7. Anónimo dijo...

    Respuesta a la carta.

    °°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°


    ARZOBISPADO DE LA HABANA
    NOTA DE PRENSA
    En respuesta al reclamo de comentarios de varios medios de comunicación, y debido a la indignación generada en un número de fieles católicos que han conocido en las últimas horas de una carta abierta dirigida al Santo Padre Benedicto XVI, de contenido ofensivo para con la Iglesia en Cuba, quiero decir lo siguiente:
    Cuando la Iglesia aceptó la misión de mediar entre los familiares de los presos o damas de blanco, y las autoridades cubanas, sabía que esta mediación podría ser interpretada de las más disímiles maneras y provocar diversas reacciones: desde el insulto y la difamación, hasta la aceptación y el agradecimiento. Permanecer inactiva no era una opción válida para la Iglesia por su misión pastoral.
    La acción de la Iglesia a favor del respeto a la dignidad de todos los cubanos y la armonía social en Cuba no comenzó hace veinte años, y ha sido una acción que no se ha apoyado, ni se apoyará nunca, en tendencias políticas, ni en las del gobierno ni en las de quienes se le oponen, sino en su misión pastoral. La Iglesia en Cuba no desviará su atención de aquello que la motivó a actuar en este proceso: el reclamo humanitario de familias que han sufrido por el encarcelamiento de uno o más de sus miembros.cont.....

  8. Anónimo dijo...

    cont..

    Esto es algo que conoce muy bien el Papa Benedicto XVI. Vale la pena recordar lo expresado hace unas semanas por el padre Federico Lombardi, portavoz de la Santa Sede: “El papel crucial asumido en el proceso de diálogo cubano por el cardenal Ortega Alamino y por monseñor Dionisio García, presidente del episcopado, ha sido posible por el hecho evidente que la Iglesia católica está profundamente arraigada en el pueblo y es intérprete atendible de su espíritu y de sus expectativas”.
    “No es una realidad extraña, no escapa en los tiempos de dificultad. Carga con los sufrimientos y trae esperanza, con dignidad y con paciencia, sin servilismo pero también sin tratar de aumentar las tensiones ni de exacerbar los ánimos, al contrario, con el compromiso constante de abrir caminos a la comprensión y al diálogo”. La Santa Sede, agregó el padre Lombardi, “apoya a la Iglesia local con su solidaridad espiritual y con su autoridad internacional”. En este sentido, “la Santa Sede se ha declarado siempre en contra del embargo, y por lo tanto solidaria con los sufrimientos del pueblo, y dispuesta a apoyar toda perspectiva de diálogo constructivo… con paciencia, se han hecho importantes progresos en esta dirección. Todos deseamos que el camino continúe”.
    Orlando Márquez Hidalgo
    La Habana, 20 de agosto de 2010

  9. Anónimo dijo...

    Varela el cinico

    http://www.youtube.com/user/27varela

  10. ar dijo...

    La Iglesia complice del régimen castrista.

    ¿Que mediación es pedir a Reina Luisa Tamayo que desista de ir al cementerio acompañada?

    ¿Que mediación es cooperar con el destierro de presos de conciencia cubanos?

    No se puede mediar entre los verdugos y sus victimas inocentes, se media ante partes que están en igualdad de condiciones para negociar y este no es el caso.

    La Iglesia solo ha servido de voceros del régimen castrista.

    Solo la imagen del Cardenal Ortega, Moratinos y el genocida Raúl Castro viendo juntos, de forma distendida, la final del Mundial de Fútbol, es una ofensa hacia los millones de cubanos condenados al exilio, hacia los familiares de los que han muerto huyendo del horror castrista y es una ofensa hacia las miles de victimas asesinadas por los Castros y su secuaces.

    Es una vergüenza que la Iglesia hable y proteste contra el "embargo" cuando ve ante sus ojos como se violan los mas elementales derechos humanos por parte de un régimen genocida al que no se ha atrevido a condenar abiertamente.

    Hasta que la Iglesia católica no condene el terrorismo de estado en Cuba, hasta que no pida abiertamente que se respeten los derechos humanos y la libertad de expresión del pueblo de Cuba, hasta que no digan que dedican sus oraciones y ruegos por las almas de las decenas de miles de cubanos muertos en el Estrecho de Florida huyendo de la dictadura, hasta que no condenen los asesinatos y los encarcelamientos, hasta que no pida públicamente al régimen de Castro que no incite a la población a la violencia ni al enfrentamiento, mientras no haga algo de eso la Iglesia merece el mas absoluto desprecio del pueblo cubano y de todas las personas de bien.

    Ante el genocidio, la tortura y la mas absoluta falta de libertad solo cabe la condena, nada mas.

    LA IGLESIA CATÓLICA CUBANA COMPLICE DEL RÉGIMEN CASTRISTA Y POR LO TANTO COMPLICES DE LAS VIOLACIONES DE LOS DERECHOS HUMANOS, DE LOS DESTIERROS Y DEL HORROR QUE VIVE EL PUEBLO DE CUBA.