Unas veces son citados para extensos interrogatorios, otras, reciben amenazas o son víctimas de secuestros express

El Centro de Información Hablemos Press ha documentado durante el mes de septiembre hasta 64 casos de abusos y detenciones arbitrarias contra la oposición pacífica en Cuba.

Gran parte de las detenciones se produce cuando los representantes de la resistencia pacífica deciden reunirse en alguna vivienda para organizar su labor opositora. El 2 de septiembre, por ejemplo, varios activistas del Partido Cuba Independiente y Democrática (CID) fueron detenidos en plena calle y conducidos a unidades policiales o abandonados a su suerte en otros municipios distantes, cuando se dirigían a casa de Sergio García y Leydi Coca, también detenidos ese día.
Lo mismo ocurrió el 22 de septiembre, en las proximidades del domicilio de Katia Sonia Martín, donde estaba prevista una reunión del CID. Este es el 'modelo preventivo': impiden la reunión deteniendo a los opositores que van a participar en ella.

Cuando los opositores consiguen ejecutar alguna de sus acciones, todas ellas pacíficas, el régimen actúa con el 'modelo represivo': golpes y arrestos de varias horas o días. Fue lo que ocurrió en septiembre con Vladimir Alejo Montes de Oca, Diosmel Alejo Montes de Oca y Orlando Corso, del Frente de Línea Dura y Boicot Orlando Zapata Tamayo.

En las provincias del interior el 'modelo represivo' adquiere connotaciones más duras. Así, por ejemplo, al activista pro derechos humanos Carlos Álvarez Guerra, fue golpeado y detenido durante una protesta pacífica. Álvarez Guerra tiene a su cuidado una hija de cuatro años, que tras su arresto fue trasladada a un hogar de niños desamparados en Matanzas. En Florida, Camagüey, Yoel Marín, fue golpeado y detenido el día 19 de septiembre en la vía publica por agentes de la Seguridad del Estado. El parte de Katia Sonia Martín asegura que "un oficial lo golpeó en el pecho con la culata de un rifle y lo dejó sin conocimiento en el suelo, acto seguido fue cargado y tirado varias veces contra el pavimento y posteriormente conducido hasta la estación de la policía de la localidad en un auto patrullero donde fue introducido de cabeza quedándoles una pierna fuera la cual la policía golpeo con la puerta del auto hasta causarle una fractura a la altura del tobillo".

Otra de las vías para reprimir a los opositores es limitar su libertad de movimientos. Unas veces el régimen monta operativos alrededor de una vivienda, impidiendo que sus moradores salgan de ella y que sus compañeros de organización entren. En otras ocasiones, los agentes secuestran al opositor el tiempo justo para frustrar sus planes. Por ejemplo, el pasado 13 de septiembre Alberto Moreno, presidente del Partido Obrero Campesino, fue detenido por la policía política en la ciudad de Manzanillo, provincia Granma, cuando se dirigía a la capital. Moreno fue conducido a un departamento de la terminal de ómnibus, y lo retuvieron por dos horas. Después que perdió el transporte en que viajaría, la policía registró sus pertenencias y le decomisó documentos de denuncia al régimen que llevaba. Luego lo devolvieron a su vivienda, sin mediar palabras.

A pesar de las palabras de contrición de Fidel Castro sobre la represión a los homosexuales en la isla, el pasado 18 de septiembre fue detenido en Boyeros, Ciudad de La Habana, el presidente de la fundación Cubana LGBT Reinaldo Arenas. Aliomar Janjaque, según el reporte de Hablemos Press, fue detenido por agentes de la Seguridad del Estado, cuando se encontraba entrevistando a homosexuales víctimas de la represión homofóbica del gobierno en los tiempos de la UMAP. Fue llevado a la estación policial de Cojímar, Habana del Este, le decomisaron la cámara fotográfica y el ordenador portátil de la organización. Fue liberado cinco días después.


(Consulte el informe íntegro de septiembre en Hablemos Press)